En diálogo con Radio Urbana, Germán Grosso, quien fuera enviado el pasado  jueves al final del día al Hospital Iturraspe, una vez que desde un Sanatorio Privado se activara el protocolo por Coronavirus, por presentar fiebre.

En su relato, Grosso, contó que el jueves a la tarde, como cualquier día normal de cuarentena, estuvo en su en casa, y que cuando se fue a bañar sintió escalofríos, por lo que esperó a su esposa, quien le tomó la temperatura y tenía 39. Por insistencia de su esposa llamó al servicio de emergencia, quienes lo trasladaron a un Sanatorio Privado de la ciudad, allí le hicieron los controles, que incluyeron tomografía, placa y estudios de laboratorio, al rato el doctor le dijo que todo estaba bien y que quizás podía ser bacteriano, pero que para sacarse las dudas pidió a San Francisco que le realizaran el hisopado, a lo que él estuvo de acuerdo. Por lo que preguntó al médico qué si lo trasladarían y le informaron que al no estar comprometido, podía trasladarse por su cuenta, y que si algún familiar quería acompañarlo, debía hacerlo con las medidas de seguridad en el asiento de atrás, pero el decidió que iría sólo para no exponer a ninguna persona.

Continuando con su relato, informó que salió desde Morteros, aproximadamente a las 12 de la noche, sin ningún inconveniente durante el trayecto.  Al llegar a San Francisco, esperó en una sala dispuesta por el Hospital Iturraspe, para estos casos una vez atendido por la doctora de guardia, la misma le manifestó que observando su cuadro general, no ameritaba estar allí; Sin embargo, le hicieron el hisopado por haberse trasladado a esa hora, asegurando que su caso no ameritaba la emergencia con la que lo enviaron, y más porque no se habían comunicado con ninguno de los médicos encargados de los hisopados. Además manifestó que fue muy bien atendido  tanto por el servicio de emergencia como por el personal del sanatorio, lo único es que según pudo conocer, el director del Hospital  se enteró por la prensa en horas de la mañana del viernes. 

Ante esta experiencia, Germán Grosso, opinó que para él, hay mucho miedo en la gente y en los médicos temor de equivocarse, por eso y por los antecedentes de su mamá, prefirieron hacer mucho y no poco, enviándolo a San Francisco.

En cuanto a su cuadro febril, Grosso dijo que desde niño, cuando está en alguna situación de estrés o presión, siempre se le dispara un pico de fiebre.

Grosso aseguró que una vez le informaron los pasos a seguir, llamó a su jefe para activar el protocolo en la Sociedad Italiana, habló con su familia, y en simultáneo, ya corrió el rumor de que tenía coronavirus, por lo que pidió que a futuro  evitar los comentarios insanos que se producen en este tipo de situaciones.