El testimonio de Celia Castro quien fue víctima de violencia de género por parte de Juan Galván. Castro sufrió heridas graves en la zona del ojo.

“El sábado pasado discutí con él y lo corrí de mi casa, horas después, cerca de las 23 aproximadamente, y para evitar una discusión frente a mis hijas accedo a ir a su casa”, contó Castro.

“Fui a la casa pero él no me hablaba, ahí estaban sus hijos, y yo me fui con ellos a mirar televisión”, comentó.

“Una hora después él viene al dormitorio y empezó a reclamarme cosas, cuando yo le dije que la corte porque estaba cansada, me pega un golpe de puño en el ojo; cuando yo busco levantarme él se para sobre la cama y sigue golpeándome; lo único a lo que atine es a taparme la cara”, relató la víctima.

“Le pedí por favor que deje de golpearme porque los chicos estaban gritando, pero su respuesta fue que suba el volumen de la televisión porque si no iban a escuchar los vecinos”, manifestó.

“Yo en un momento atino a sacarme una hebilla del pelo y buscaba rayarlo con eso para que deje de pegarme y le pedí por favor llorando que me lleve al hospital porque no me sentía bien; él no me vio la cara pero a mí me salía sangre por la boca y sentía nauseas”, expresó Castro.

“Luego de golpearme, le agarró una crisis de nervios y se empezó a golpear las rodillas y la cabeza contra la pared”, manifestó Castro.

“En un momento él me dice que me iba a llevar al hospital pero que tenía que decir que se nos había cruzado un perro; yo accedi a decirle que si porque era la única forma de poder salir de esa casa”, expresó Castro.

“Llegamos al hospital y había 3 miembros del personal de seguridad en la puerta, cuando él estaba estacionando la moto, yo le aprieto la mano a uno de ellos, me saco la remera de la cara y le muestro los golpes en el ojo”, contó Castro.

“El cuándo entró se hizo atender porque según su versión se nos había cruzado un perro; a todo esto yo todavía no había hablado”, aseguró Castro.

Y agregó: “no sé si lo vendaron o no porque ya no lo veo más, lo hacen retirar de la guardia y ahí hable con la doctora que me atendió para que por favor me llame a la policía porque no nos habíamos caído, sino que él me había golpeado”.

“Después de que me revisó y redacto el informe, me trasladaron a la comisaria donde estuve varias horas declarando acompañada por mi familia y salí de ahí con custodia”, finalizó Castro.